Y como es normal, todo nos explotó en la cara. Yo por idiota y tú, por demasiado listo. Y ahora lloramos los dos, en dos ciudades distintas, y por motivos distintos. Pero al fin y al cabo, todo se resume en lo mismo: nos hemos perdido. Los dos. Tú y yo, quenunca significó nosotros. Y para ti y para mí, nunca significó lo mismo. Todas las canciones me suenan a lo mismo y me duelen los kilómetros que, sin pensarlo, he puesto de por medio. Esos que en realidad siempre existieron porque me acostumbré a tenerte, aún sabiendo que no te tenía. Y que lo cerca que estaba de ti era lo más lejos que había estado de nadie jamás. Te escribí tantas cosas que nunca has leído y es que, tal vez, nunca llegues a entender lo que he sentido por ti, por esta mentira que yo sola he elegido creerme.
Me duele. Por haberte querido; por haberte pedido que me enseñaras a volar, y haberme creído que volaba... ahora viene cuando debería aprender a ir aterrizando, y a desenvolver todas esas noches que no vamos a tener. A desarropar todos los abrazos. A desaprender todas las canciones. Pero lo poco que nos queda sigue siendo demasiado, entonces vamos a esperar a que el tiempo haga su trabajo, y olvidar. Te voy a echar de menos, y aunque este menos se convierta en más, tengo demasiado que perder.No voy a regresar, no me lo pidas más.